
Es una de las energía más magnéticas, profundas y transformadoras del zodíaco.
La mujer Escorpio es misterio, poder y transformación. Su energía vibra en lo más profundo del alma, donde nada es superficial y todo tiene significado. Ella siente intensamente, ama con entrega y vive cada experiencia como una oportunidad para renacer.
Regida por Plutón, el planeta de la muerte y la regeneración, y por Marte, el planeta de la acción, la mujer Escorpio es una mezcla fascinante de pasión y fortaleza interna. Puede atravesar las sombras sin miedo, porque sabe que solo quien se atreve a mirar su oscuridad puede iluminar verdaderamente su luz.
Su mirada penetra, su intuición no falla y su presencia transforma a quien la rodea. Donde otros ven caos, ella ve un proceso; donde otros se rinden, ella resurge más fuerte.
La mujer Escorpio no teme al cambio, lo provoca. Sabe cuándo cerrar un ciclo, cuándo decir adiós, y cuándo renacer de sus propias cenizas. No busca brillar para ser vista, sino para ser auténtica.
En el amor, entrega su alma; en la vida, su voluntad. Y cuando se siente en su centro, su energía puede sanar, guiar y despertar a los demás.
“Soy fuego que purifica, agua que transforma y alma que renace. No vine a temer, vine a sentir.”
